*Y no es por despiste. Es por hambre, por orgullo y porque entre dos carnes cabe todo un territorio
Del 20 al 30 de noviembre, nace el Aragón Cachopo Fest: el primer festival que celebra el plato más vendido en restaurantes de la comunidad. Aunque venga de Asturias. Aunque lo hayamos hecho nuestro. Aunque lo hayamos empanado todo.
Aragón se empana. Literalmente. Pero no por despiste: por hambre. Y por orgullo.
Nace ARAGÓN CACHOPO FEST, el primer festival que celebra este plato tan nuestro… aunque venga de Asturias. Porque el cachopo ha cruzado fronteras, se ha adaptado al paladar local y hoy es uno de los platos más vendidos en restaurantes de toda la comunidad. Y eso, merece una fiesta. Merece diez días. Merece empanarse entero.
Del 20 al 30 de noviembre, Aragón se convierte en una declaración gastronómica con forma de filete crujiente. Restaurantes de Zaragoza, Huesca, Teruel y otras localidades presentarán sus versiones más creativas, tradicionales, cañeras o experimentales del cachopo. Porque aquí no hay límites. Solo hambre y producto local entre dos carnes.
¿Por qué el cachopo? Porque los organizadores llevan varias ediciones proponiendo llenar Zaragoza con propuestas de lo más creativo entre dos filetes. Y está demostrado que cabe de casi todo: queso de Radiquero, jamón de Teruel, longaniza de Graus, borraja, ternasco, cebolla de Fuentes, trufa del Moncayo… Ahora se extiende a todo el territorio. Porque cada comarca, cada productor, cada sabor autóctono tiene su lugar en este formato generoso y versátil.
El cachopo gusta tanto como nos gustó Forest Gump y su frase, “la vida es como una caja de bombones nunca sabes lo que te va a tocar”: y de eso va, de que lo locales, creen, mezclen, rellenen, jueguen. Y porque en el fondo, el cachopo es muy aragonés: contundente, generoso, y con mucho carácter. Como nosotros.
No es casualidad que en 2024 el Restaurante Más Torres de Zaragoza se proclamara Campeón del Mundo del Mejor Cachopo en la categoría de carne, un galardón otorgado por La Guía del Cachopo en un certamen internacional con más de 105 participantes de 10 países. Fue la primera vez en más de una década que el premio salió de Asturias o Madrid. Y en 2025, Señor Cachopo de Zaragoza quedó subcampeón mundial.
Conclusión: Aragón no solo consume cachopos. Los domina.
Hemos empanado Aragón entero (y no es broma)
Sí, nos lo hemos tomado con humor. Hemos empanado Aragón entero. La imagen corporativa del festival es el mapa de la comunidad convertido en un cachopo dorado y crujiente. Porque queríamos algo imposible de ignorar. Algo que dijera: «Aquí está pasando algo grande. Algo sabroso. Algo nuestro».
Pero detrás de este cachopo XXL hay una declaración de intenciones: hacer de la gastronomía un punto de encuentro, un juego y una forma de poner en valor lo que comemos. El cachopo no es solo un plato: es un vehículo para contar quiénes somos, qué producimos y cómo lo hacemos.
Entre dos carnes empanadas cabe un territorio entero. Y Aragón ha decidido que es el momento de demostrarlo.
El continente es asturiano. El contenido, aragonés.
Seamos claros: el cachopo nació en Asturias. Y le debemos respeto. Pero el cachopo que se come en Aragón tiene identidad propia. Porque el relleno lo cambia todo. Porque aquí metemos ternasco en lugar de ternera, trufa negra en lugar de champiñón, queso artesano local en vez de cabrales. Porque cada restaurador interpreta el formato a su manera, con libertad y con orgullo.
«El continente es asturiano, el contenido es aragonés», explican desde Zaragoza Food Fest, organizadores del evento. «No es una invasión. Es una colaboración creativa no solicitada. Como cuando tu vecino te deja el coche y se lo devuelves tunneado. Con cariño, pero mejorado».
Y los datos lo confirman: el cachopo se ha consolidado como uno de los platos estrella en la hostelería española. El consumo de carne en los hogares españoles creció un 2,4% en 2024, con la hostelería registrando incrementos notables en gasto y frecuentación. El cachopo, por su versatilidad y capacidad para incorporar productos locales, se ha convertido en un éxito en las cartas de todo el país.
«Queremos llenar los restaurantes, hacer ruido y demostrar que el cachopo puede ser un vehículo perfecto para poner en valor el producto de cercanía», explican desde la organización. «Y de paso, empanamos el territorio entero. Porque si ya éramos cabezones, imagina ahora que somos crujientes».
10 días. 3 provincias- 1 misión. Llenar Aragón de Cachopos.
El Aragón Cachopo Fest arranca el 20 de noviembre y se extiende hasta el 30 de noviembre. Diez días para recorrer Aragón de cachopo en cachopo, descubriendo rellenos sorprendentes, combinaciones imposibles y sabores que solo pueden nacer aquí.
Las inscripciones para restaurantes se abren en breve. Atentos. Porque este no es un festival más. Es una oportunidad para formar parte de algo que está empezando, algo que tiene hambre de crecer, de expandirse, de conquistar paladares.
Es una oportunidad para demostrar que Aragón no solo tiene producto de calidad, sino también creatividad, descaró y ganas de hacer ruido.


