El mítico bar ubicado en Gran Vía, famoso por sus fritos, sigue la estela de otros clásicos que han cerrado las puertas en Zaragoza durante los últimos meses.
Adiós al rey de los fritos. El Bar Marly, un clásico de Zaragoza famoso por sus tapas de fritos, ha cerrado definitivamente sus puertas. Este establecimiento, situado en el número 50 de la Gran Vía, ha sido durante años un referente entre los amantes del tapeo más auténtico, convirtiendo la ‘fritanga’ en todo un arte. Generaciones de zaragozanos han disfrutado en este establecimiento, en el que tan solo su dueño se sabía de memoria todas y cada una de las tapas que había en el mostrador, por muy similares que parecieran.
La información de su cierre la adelantaba el diario digital Hoy Aragón, que asegura que el motivo del cierre es la jubilación de su propietario, que durante los últimos meses ya no trabajaba en el negocio por motivos de salud.
La noticia del cierre del Bar Marly llega tras las recientes despedidas de otros clásicos de Zaragoza, como el Texas -lleva meses cerrado por motivos de salud de sus dueños y no se sabe si reabrirá sus puertas-, el Bar Benidorm, muy cerca del Marly, o la Cervecería Munich, en la plaza de San Francisco.